Macarons de té verde matcha y vainilla

Estos días estoy inspirada con los macarons, y después de hacer estos de limón me entraron ganas de probar algo nuevo. He estado experimentando con el matcha en polvo (té verde) para cocinar, aunque —aparte del clásico latte de matcha— los resultados no me han entusiasmado. Pensé que añadirlo a las conchas de los macarons para darles sabor a té, además de un color verde muy primaveral, sería divertido.

Como además tenía en la despensa unas preciosas vainas de vainilla (valga la redundancia), me propuse hacer un relleno inspirado en el delicioso Infiniment Vanille de Pierre Hermè. El resultado me ha encantado... el amargo del matcha con la dulce y aromática vainilla funcionan MUY bien.  :)



Pero he de añadir que estos me salieron algo "rugosos" (comparad con estos) porque por no pasarme no hice suficiente macaroneo al final del proceso. Por suerte es un error fácil de solucionar y que no afecta al sabor.  ;)




¡Que paséis un buen fin de semana!

***

Ingredientes (para unos 36 macarons)
110 g de almendra en polvo
225 g de azúcar glas
125 g de clara de huevo
50 g de azúcar blanco
té verde matcha (dependiendo del tipo, 1–2 cucharadas hasta alcanzar el color deseado)

Relleno
130 g de yogur griego
2 vainas de vainilla
150 g de chocolate blanco de calidad

Preparación de las conchas
1. Tamizar la almendra con el azúcar glas. Pasar por la picadora hasta que quede una harina fina.

2. Poner las claras en un cuenco grande. Batir unos 9 minutos, 3' a velocidad baja y después a velocidad alta. Casi al final, añadir el azúcar y seguir batiendo hasta que quede como firme como espuma de afeitar. Antes de terminar de batir se añade el té verde matcha tamizado para que se mezcle bien.

3. Ahora se añade la mezcla de almendra y azúcar al merengue. No hace falta volverla a tamizar, y se puede añadir toda de golpe. Es muy importante remover con espátula de goma (macaronear) de 35 a 40 veces para llegar a la consistencia adecuada. Si no lo hacéis lo suficiente la mezcla quedará densa y mal mezclada, y si lo hacéis demasiado quedará muy líquida. Dicen que la mezcla debe quedar como si fuera lava.

4. Poner la mezcla en una manga pastelera y hacer círculos de unos 4 cm de diámetro sobre una bandeja con papel encerado o silicona. Hay que dejar espacio suficiente entre los macarons porque se expanden un poco. Truco: Si tienen piquitos encima de la manga pastelera, podéis rozarlos con el dedo humedecido y desaparecerán.

{La textura debe ser un pelín más fina que esta para que queden más brillantes y no queden picos.  ;)  }

5. Dejar secar los macarons al menos media hora, pero más si hay humedad en el ambiente. Yo los dejo hora y pico. La parte de arriba debe secarse y no pegarse al dedo al tocarlos. Esto es fundamental para que luego les salga la "faldita" en el horno. Otro "truco rápido" que he probado en otras ocasiones es meterlos en el horno a temperatura muy baja (50°C). En cuanto empiece a secarse la capa de arriba, subid la temperatura a 150°C y seguid horneando unos 10–12 minutos. Si todo ha ido bien, enseguida veréis como les sale la característica "faldita" alrededor con el aumento de calor. IMPORTANTE: No utilicéis el aire en hornos de convección, solo el calor arriba y abajo.

6. Sacar del horno y dejar enfriar antes de despegarlos.

*Los macarons se pueden hacer el día de antes de rellenarlos y meterlos en la nevera en un recipiente cerrado. Incluso es preferible, porque al secarse se rellenan mejor.

Preparación del relleno
1. Cortar los extremos de las vainas de vainilla. Abrir las vainas con cuidado por el centro (sin cortar la parte de abajo, solo la de arriba). Con un cuchillo, raspar el interior varias veces hasta que hayamos sacado toda "la sustancia". Cortar las vainas a trozos.
2. Mezclar la vainilla y las vainas cortadas con el yogur y llevar a ebullición en un cazo. Retirar del fuego, tapar y dejar infusionar durante 30 minutos.
3. Deshacer el chocolate blanco al baño maría.
4. Retirar las vainas cortadas de la mezcla. Verter la mezcla sobre el chocolate fundido en tres veces, removiendo bien. Echar en una fuente plana para que se enfríe. Podemos meterlo en la nevera cubierto con plástico hasta que esté listo para usar.
5. Una vez enfriado y con una consistencia más densa, meter en una manga pastelera para rellenar los macarons

Y recordad, MUY IMPORTANTE: hay que dejar reposar los macarons ya acabados al menos 24h para que los sabores se desarrollen. ¡Están mucho más buenos! ;)

5 comentarios:

  1. Nunca he probado las macaroons con Te verde, sin embargo debo decir que uso mucho el Matcha para cocinar da un sabor especial a algunos postres. Nunca he podido lograr los macaroons a la perfección siempre o son muy secos o quedan huecos, es uno de mis retos personales. Mis respetos :)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. A mí también me gusta mucho el matcha, aunque todavía no tengo mucha experiencia cocinando con él. Creo que el truco de los macarons es perderles el miedo y practicar hasta pillarles el punto para tu horno y el ambiente de tu cocina. Como dices, son un reto. :)

      Eliminar
  2. Unos macarons perfectos!! El te matcha los debe de hacer muy especiales. Besos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Gracias, Pili! La verdad es que la combinación del té amargo y la vainilla dulce va muy bien. ;) Un saludo

      Eliminar
  3. Nos encantan todos tus artículos, pero este es taaan dulce, ¡habrá que probar a hacerlos! ;)

    ResponderEliminar